* El zafarrancho, producto de la inconformidad de un grupo de “zetas” con las medidas disciplinarias
* Advierte el Gobernador que no se permitirá que la prisión se convierta en campo de batalla y mucho menos que sea coto de poder de un grupo de delincuentes
Junio 0Z de 2011
CANCÚN, Quintana Roo;Una riña entre reclusos de la Cárcel de Cancún, inconformes con las medidas adoptadas por las autoridades para asumir el control total de la prisión, dejó hoy saldo de 30 heridos, 13 de ellos trasladados al Hospital General.
La mayor parte de los lesionados presentaba heridas leves. Sólo uno está grave, tiene una herida en el cráneo causada por arma blanca.
De acuerdo con la información oficial, el zafarrancho, que fue controlado casi de inmediato, tiene su origen en el rechazo de un grupo de “zetas” a las medidas disciplinarias adoptadas por las autoridades de la prisión, que encabeza el director Higinio Sánchez Baltazar.
La estrategia para restarles fuerza incluyó su segregación y el cierre de las tiendas dentro de la prisión, lo que generó inconformidad entre ese grupo de delincuentes, quienes son rechazados por el resto de los internos.
El secretario de Seguridad Pública, Gral. Carlos Bibiano Villa Castillo, advirtió que las autoridades seguirán aplicando mano dura en los penales de Quintana Roo, pese a las protestas de los reclusos que intentan tomar el control.
De hecho, el gobernador Roberto Borge Angulo ordenó el traslado a Chetumal de ocho internos considerados de alta peligrosidad y dijo que, más que nunca, se confirma la necesidad de construir en Quintana Roo un Centro Federal de Readaptación Social.
Los reos trasladados fueron identificados como Víctor Manuel Delgado Medrano, (a) “El chumil”, Jorge Manuel Vela Velázquez “El comandante Vela”, Andrés García López “El apá”, Gabriel Morantes Villanueva “El Beto”, César Guerrero Méndez, “El Monstruo”, Adán Núñez Alvarez “el comandante Adán”, José del Carmen Pérez Izquierdo “El huevo” y Daniel López Barrientos “El bóxer”.
—No vamos a permitir que la cárcel se convierta en campo de batalla y mucho menos en coto de poder de un grupo de delincuentes —subrayó.
Una vez que el zafarrancho fue controlado, elementos de la Policía Estatal realizaron una revisión en las instalaciones y encontraron varias dosis de mariguana y armas blancas de fabricación casera.